El concierto inaugural del Festival Argerich será con música de cámara el sábado 15 de julio a las 20:00 horas con la presencia de Martha Argerich junto a una variedad de músicos interpretando a Rheinberger y Schumann. En este artículo abordaremos la relación de Schumann con la gran pianista argentina.

La relación entre un intérprete y el repertorio que interpreta es un aspecto fundamental en la música. En el caso de Martha Argerich, su conexión con las obras de Robert Schumann deja una serie de interpretaciones icónicas para el disfrute de los melómanos.

Robert Schumann (1810-1856) fue uno de los compositores más influyentes del siglo XIX y una figura central en el movimiento romántico en la música. Nacido en Zwickau, Alemania, Schumann mostró un talento musical temprano y comenzó su educación en piano y teoría musical a una edad temprana. Sin embargo, una lesión en la mano truncó sus aspiraciones como pianista virtuoso y lo llevó a centrarse en la composición, carrera que marcó la historia de la historia de la música con algunas de las obras más brillantes del romanticismo. Schumann fue un innovador en la forma musical, experimentando con estructuras y formas más libres, lo que contribuyó a su estilo distintivo y original.

Argerich, con su talento virtuosístico y su profunda comprensión emocional, transmite la riqueza musical de Schumann de forma inequívoca. En este artículo, exploraremos dos ejemplos representativos de esta fascinante relación: el Concierto para Piano y Orquesta en La menor, Op. 54, y «Von fremden Ländern und Menschen» de Kinderszenen.

Robert Schumann: Concierto para Piano y Orquesta en La menor, op. 54 / Martha Argerich, piano · Daniel Barenboim, director · Berliner Philharmoniker

El «Concierto para Piano en La menor, Op. 54» de Robert Schumann es un concierto de tres movimientos que se estrenó en Dresde el 4 de diciembre de 1845. La obra fue escrita para su esposa Clara Wieck Schumann, quien era considerada una de las grandes pianistas de la época y también interpretó el estreno del concierto.

Originalmente, existía una versión temprana de esta pieza, un fantasy de un solo movimiento, que se estrenó durante un ensayo de la Orquesta Gewandhaus de Leipzig el 13 de agosto de 1841, con Clara como solista y su amigo Felix Mendelssohn dirigiendo la agrupación. Cuatro años más tarde, Robert expandió la pieza y la convirtió en un concierto completo.

El primer movimiento expansivo, «Allegro affettuoso», se basa estrechamente en el fantasy inicial para piano, presentando un tema de apertura ferozmente poderoso que contrasta con un dúo lírico entre el piano y el clarinete, brindando una elegante contraposición entre los dos estados de ánimo divergentes. El segundo movimiento, un «Intermezzo» dulce y melódico, evoca una escena de tranquilidad y felicidad doméstica. Sin pausa, la pieza pasa al movimiento final, «Allegro vivace», retomando temas anteriores y concluyendo con un final vibrante.

El «Concierto para Piano en La menor» de Schumann es una obra destacada en el repertorio del piano y muestra la maestría compositiva de Schumann, así como su habilidad para crear contrastes emocionales y unir diversos temas en una estructura coherente y emocionante.

Robert Schumann: «Von fremden Ländern und Menschen» de Kinderszenen (bis) / Martha Argerich, piano / Grabado en la Berliner Philharmonie, 29 de noviembre de 2014. La Digital Concert Hall de la Berliner Philharmoniker

Robert Schumann, reconocido tanto por sus habilidades literarias como por su talento musical, demostró una notable destreza para transmitir emociones a través de sus composiciones. Una de sus obras más destacadas, Kinderszenen o Escenas de la infancia, nos sumerge en un mundo onírico y poético que evoca la inocencia y la imaginación de los niños. Cada movimiento de esta obra maestra musical nos transporta a un paisaje emocional único.

Uno de los movimientos más conocidos de Kinderszenen es «Von fremden Länder und Menschen» («De tierras y gentes extranjeras»). Este fragmento en particular nos sumerge en una atmósfera mágica, evocando un mundo de maravillas y asombro. A medida que exploramos esta pieza, se estudian por separado las tres voces principales de la música: la melodía, el bajo y el acompañamiento. Este enfoque paso a paso permite a los estudiantes dominar la pieza de manera efectiva, desvelando la belleza intrínseca y la complejidad de la composición.