
¿Quién es Clara Wieck?, el exitoso espectáculo de teatro musical creado por Betty Gambartes y Diego Vila se presentará a través de la plataforma Vivamos Cultura.
Disfrutá la obra en: www.vivamoscultura. buenosaires.gob.ar
Desde MusicaClasicaBA volvemos a compartir la entrevista a sus creadores para saber más acerca de esta interesante propuesta.
Por Maxi Luna.
Betty, tenés una larga experiencia en musicales ¿Qué es lo que te atrae del género?
Betty: ¡Justamente, la presencia de la música! Aún cuando dirijo espectáculos dramáticos que no tienen música, siempre busco la forma de que esté presente.
¿Cómo surge la idea de hacer una obra sobre Clara Wieck?
Betty: Yo había conversado con el músico Eduardo Delgado sobre la posibilidad de crear una obra con música para piano, pero que no fuera un recital sino un espectáculo; en la búsqueda de nuevos públicos que se acercaran a un repertorio clásico pero por fuera del concepto del recital pianístico.
Le conté esto a Diego Vila y allí inmediatamente pensamos en Clara Wieck. Una mujer que gravitó en la música del siglo XIX y que nos aportaba todos los elementos que necesitábamos para crear una historia e incluir el maravilloso repertorio de Schumann, Brahms y el de la propia Clara.
¿Qué fue lo que te atrapó del personaje?
Betty: Su enorme fuerza, magnetismo, su lucha y su resiliencia. Clara fue una niña prodigio, mimada por el público y las cortes europeas, se enamora de Robert Schumann, tienen 8 hijos, pero Robert muy pronto es internado en una clínica para alienados. Este calvario duró 2 años y medio en donde la relación con Brahms fue un pilar esencial en su vida y la de sus hijos. Período en el cual Clara nunca visitó a su marido. Hay tantas hipótesis que era un material interesante para crear una obra.
¿Cómo fue el proceso de estudio y creación de la obra?
Betty: Como todo lo que emprendemos fue largo y minucioso. Primero de información para luego comenzar a buscar los puntos que nos interesaban desarrollar.
Diego, ¿cómo fue el proceso de selección de la música?
Diego: Fue simultáneo a la escritura del texto. Pensamos en la música como un personaje más en la obra. Entonces, mientras escribíamos, buscamos entre las obras de Schumann y Brahms aquellas que pudieran generar un diálogo con el personaje de Clara. Aquellas que pudieran producir los climas necesarios.
¿Cómo se logra la integración entre música y acción dramática?
Diego: La actriz, el pianista y el barítono se van alternando unas veces, superponiendo otras. La mayor parte de las obras son de Robert Schumann y Johannes Brahms. Sus obras dialogan con el personaje de Clara. A la vez nos dan el contexto musical en el que ella vivía. Hay también dos obras de Clara Wieck que forman parte de una escena en la que ella habla de su relación con la composición musical.
¿Cuál era la apreciación que tenía Clara de su propio arte y cómo fue evolucionando en el tiempo?
Betty: Clara era una música de gran formación, acostumbrada desde niña a la improvisación en los conciertos que daba. Creo que la cercanía con la obra de dos de los genios más importante de la música clásica y las críticas que recibió como compositora en donde argumentaban que era una gran compositora pero que no alcanzaba la altura de un hombre; “¿Cuál es la altura de un hombre?” se indignaba Clara. Estos comentarios deben haberla afectado.
Pienso que estos horribles prejuicios más sus obligaciones como intérprete, su dedicación a la difusión de la obra de Schumann y Brahms, sus largas giras, deben haber influido para que pusiera la composición en un segundo plano.
¿Cuál era la visión estética de Clara con relación a la música de su época y en que difería, si es que lo hacía, de la visión de Robert Schumann y Johannes Brahms?
Diego: Clara Wieck fue una importantísima intérprete, una pianista que dominó como pocos la escena musical europea a lo largo del siglo diecinueve. Y aunque manejaba todo el repertorio, se abocó a la difusión de lo más moderno de su época, principalmente Schumann y Brahms. Estaba muy en consonancia con la visión de ellos. Y por su importancia como intérprete podía imponer esas obras en sus programas. Lo hizo siempre, sin concesiones. El tiempo le dio la razón.
¿Creén que de a poco la música de Clara comenzará a tener el lugar que se merece?
Diego: No lo sé. Hoy es posible encontrar sin dificultad versiones de muchas de sus obras. Pienso que cada vez se la conoce más.
¿Qué nos pueden adelantar de la trama?
Betty: se presenta ante el público para dar testimonio de su vida, de su pasión por la música y de los acontecimientos que aún la juzgan: su ausencia durante los años de internación de Schumann y su relación con Brahms, catorce años menor que ella.
Viene desde su tiempo histórico a nuestro presente para relatarnos su vida. Se dirige directamente al público, le pregunta y lo cuestiona por sus opiniones sobre su vida. Hoy, en el día de uno de sus últimos cumpleaños, una carta de Brahms la decide a contarnos que pasó. El piano y el canto se suman a su discurso. Recordemos que la mayor parte de las cartas entre ellos fueron quemadas.
¿Cómo interpela a la sociedad actual, en el contexto de las luchas de las mujeres, una mujer cómo Clara Wieck.
Betty: Como un gran ejemplo de cuando una vocación es un faro que te guía para sortear tantas pesadumbres y desgracias como acontecieron en la vida de Clara. A pesar de los requerimientos de su marido, a pesar de la enfermedad y muerte de algunos de sus hijos, no se dejó vencer y continuó con su carrera, con su vocación. Como Clara dice en nuestra obra “El piano me salva”.
Leer también la entrevista a Annie Dutoit Argerich
LA OBRA
A través de la presencia de una mujer, Clara Wieck, la pianista más influyente y aclamada de la Europa del siglo XIX, el espectador accede al mundo artístico y musical de su época.
La vehemente Clara comparte sus pasiones y sus temores, su relación profunda con la música y con los dos grandes amores de su vida: Robert Schumann y Johannes Brahms. Ella fue inspiración, sostén y amor de ambos compositores, además de su más apasionada divulgadora.
La obra toma vida a través del diálogo que se establece entre Clara y la música de Schumann y Brahms, interpretada por el pianista y el barítono. En ese diálogo Clara revive momentos de su vida: sus comienzos como niña prodigio, su temprano enamoramiento de Schumann a los nueve años y su lucha por independizarse de un padre posesivo y manipulador para casarse con el hombre que amaba; su firmeza para sostener su carrera profesional siendo madre de ocho hijos; la trágica enfermedad mental y temprana muerte de su esposo; su cuestionada y extensa relación amorosa con Johannes Brahms, catorce años menor que ella; su empeño en difundir la obra de quienes ella consideraba los compositores más importantes de su época; la enfermedad y muerte de varios de sus hijos y, al mismo tiempo, el éxito abrumador de sus innumerables giras por toda Europa.
Clara Wieck, una mujer excepcional que trascendió más allá de los límites que le imponía su contexto histórico.
LA AUTORA Y DIRECTORA
Betty Gambartes es autora y directora de teatro y ópera. Creó numerosos espectáculos musicales basados en la teatralidad que surge de los versos de la canción popular, como Arráncame la vida –escrita junto con Chico Novarro–, uno de los musicales más exitosos del teatro argentino. Asimismo, en complicidad artística con el músico Diego Vila estrenó No te prometo amor eterno (Teatro Metropolitan Sura, 2007), Manzi, la vida en orsai (Teatro La Comedia, 2013), Lo prohibido (Paseo La Plaza, 2017) y la ópera Orestes, último tango, presentada en Holanda y Bélgica. En el Complejo Teatral de Buenos Aires montó Discepolín y yo, inspirado en el universo poético de Enrique Santos Discépolo y La ópera de tres centavos de Bertolt Brecht (Teatro Presidente Alvear, 2003 y 2004).
Leer más entrevistas en https://musicaclasica.com.ar/categoria/entrevista/