Repasamos la historia del pianista Paul Wittgenstein que perdió su mano derecha en la Primera Guerra Mundial y siguió tocando únicamente con la izquierda.
Compartimos el Concierto para mano izquierda que Maurice Ravel le dedicó.
Paul Wittgenstein nació el 11 de mayo de 1887 en el seno de una acomodada familia vienesa, cuyo hogar era uno de los epicentros de la cultura en la Austria de finales del Siglo XIX.
Entusiasta del piano desde corta edad, alumno de prestigiosos maestros tales como Theodor Leschetizky y Josef Labor, tuvo la precocidad y el talento en sus primeros años de vida como para participar en dúos de piano con compositores de la talla de Mahler, Brahms y Richard Strauss en veladas artísticas en su hogar.
Primera Guerra Mundial
Wittgenstein debutó como pianista en 1913 con buen éxito, sin embargo, pese a que su carrera estaba en ascenso, tuvo que unirse al ejército al año siguiente de iniciada la Primera Guerra Mundial.
Durante un asalto ruso en Polonia fue herido de gravedad y apresado por los rusos. Como consecuencia de las heridas tuvieron que amputar el brazo su brazo derecho. Este lamentable suceso sumió al joven Wittgenstein en una gran agonía y depresión.
Una vez concluida la Guerra, Wittgenstein toma la decisión de reagrupar todas sus fuerzas y empezar una tarea de estudio y recopilación de toda la música existente para ser interpretada por una sola mano.
Incluso su anciano maestro Labor (el cual para entonces estaba totalmente ciego) compuso, con la ayuda de Wittgenstein como transcriptor, varias obras para piano especialmente dedicadas a él.
Su talento y perseverancia le merecieron el respeto de la comunidad artística, y muchos afamados compositores tales como Prokofiev, Britten, Korngold, Schmidt, Hindemith y Richard Strauss compusieron música especialmente para él.
Sin embargo, ninguna de esas obras alcanzó el brillo y la fama que obtuvo el Concierto para Piano “para la mano izquierda” que compuso Maurice Ravel.
Concierto para Piano para la mano izquierda
Maurice Ravel estaba a en el proceso de componer su celebrado Concierto en Sol Mayor para Piano cuando recibió en su casa a Paul Wittgenstein, y conmovido por el caso decidió posponer la obra que tenía en proceso y desarrollar la comisión de escribir una obra especialmente para Wittgenstein, tarea que le consumió nueve intensos meses.
Wittgenstein estrena la obra el 5 de enero de 1932 en Viena, con él al piano y Robert Heger dirigiendo a la Sinfónica de Viena.
En esa primera presentación no estuvo presente Ravel, sin embargo la obra siguió en cartelera en Europa y no fue sino hasta finales de ese mismo año que el compositor pudo escucharla con Wittgenstein en el piano.
El primer encuentro de ambos, luego del concierto, no fue nada agradable. Ravel notó que Wittgenstein había hecho cambios en la orquestación de la partitura, con los cuales no estaba de acuerdo. La conversación entre ambos fue brusca y pesada.
Este malestar hizo que Ravel vetara una interpretación de la obra en París a menos que la obra se respetase en su integridad, aspecto que Wittgenstein no aceptó.
Esta historia tuvo un final feliz: Wittgenstein aceptó la posición de Ravel. Con un acuerdo de paz entre ambos, finalmente, la obra se interpretó en París el 17 de enero de 1933 con Wittgenstein en el piano y Ravel dirigiendo la orquesta.
Ascenso al poder de los nazis
Wittgenstein obtuvo la nacionalidad estadounidense en 1946, después de haberse instalado en 1938. Con el ascenso al poder de los nazis, el músico intentó convencer a su familia para que se trasladaran con él.
Si bien, la familia de Wittgenstein se había convertido al cristianismo tres generaciones antes de su nacimiento, por el lado de su padre, y dos generaciones, por el de su madre; bajo las leyes de Núremberg fueron clasificados como judíos y se le prohibió tocar el piano en público.
Wittgenstein huyó del Reich, abandonando a sus hermanas, que se negaron a seguirle. Se presentaron ante el tribunal con el orgullo propio de una familia rica y famosa de la alta burguesía del país e intentaron negociar su protección a cambio del dinero de la familia.
Para ese entonces Paul ya vivía en Estados Unidos y se negó a establecer acuerdos con los nazis. Pero no tuvieron en cuenta la opinión de Paul y las divisas familiares -que bien podrían considerarse como la fortuna privada más grande de Europa– fueron transferidas al banco berlinés.
Esa acción ayudó a financiar los gastos del frente nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
Paul Wittgenstein vivió el resto de su vida en Estados Unidos, donde ejerció de intérprete y profesor. En este último ámbito, publicó, en 1957, tres volúmenes de piezas con el objetivo de mejorar la técnica para la mano izquierda.
Murió el 3 de marzo de 1961 en Nueva York, acontecimiento que supuso el descubrimiento de partituras que se le habían dedicado y que, posiblemente porque no le gustaban, ni las había interpretado ni había dejado que lo hiciera otra persona.