La violinista neoyorkina Miranda Cuckson en el CETC

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Les presentamos la entrevista, en exclusiva para MusicaClasicaBA, que realizamos con Miranda Cuckson, donde nos habla de su doble labor como directora e intérprete del Ensamble Nunc y de algunos aspectos de la música contemporánea.

 

El pasado 15 de agosto concurrimos al CETC (Centro de Experimentación del Teatro Colón) en el marco de una serie de dos conciertos y una charla dedicados al trabajo del compositor argentino Mario Davidoski, celebrando su cumpleaños número 80. Fue una noche de grandes descubrimientos: la música del propio Davidoski y la increíble interpretación de los músicos del Ensamble Nunc.

Nunc (“ahora» en latín) fue fundado en el 2007 por la violinista Miranda Cuckson, su directora artística. Desde su concierto inaugural en Nueva York, Nunc ha presentado varios programas por temporada y ha estrenado numerosas obras de distinguidos compositores. 

Después del concierto en el CETC, quedamos muy impresionados con su interpretación, al punto de sentir la Música Contemporánea de una manera totalmente diferente. ¿Cómo surgió la idea de crear Ensamble Nunc?

Quería crear un ensamble con una lista flexible de intérpretes para que el proyecto pudiera incluir a cualquier músico con una pasión particular, afinidad o talento hacia la música de un compositor o un determinado tipo de presentación. Había trabajado con numerosos intérpretes y compositores, entonces la idea fue juntar proyectos basados en la necesidad de una obra determinada.

Recientemente vi una entrevista con Christian McBride, el bajista de jazz, en la cual decía que todos los grupos realmente buenos de jazz en un determinad momento son como una «gran banda de jazz» porque los mejores intérpretes simplemente van tocando entre ellos en diferentes formaciones. Y la escena de la nueva música es muy similar. Se ha expandido pero sigue siendo básicamente una red de personas. Trabajo con muchos músicos pero generalmente como una organización y presentadora, prefiero recurrir a un grupo de personas y talentos, sobre todo para tratar de dar lo mejor a los compositores.

Veo la interpretación como una combinación de preparación y espontaneidad, estudiás la partitura y pensás en ella, luego entonces trabajás hacia la mayor exactitud y ejecución en los ensayos, para luego, en la presentación, poder soltar el flujo emocional de la pieza, para que el público pueda responder a esa expresión emocional espontánea y no sólo al virtuosismo o la impresionante coordinación. Especialmente en la música desafiante, hay que lograr un equilibrio entre mantener la cabeza fría pero dejando que el calor de la emoción fluya en la obra.

Encuentro importante también sentir la obra transcurriendo en el tiempo, como una progresión o estructura, o una secuencia de humores o sutiles cambios y transformaciones. Y creo que la interpretación implica una sensibilidad en el flujo interno de la música, más allá de lo que está escrito en la página, sería cómo hay que tocar para relacionar las notas unas con otras, cómo la línea empuja o tira, se mueve hacia adelante o hacia atrás o se queda quieta, cómo cambia la textura de una obra, con ciertas líneas viniendo al frente o fundiéndose con el grupo. Estas cosas hacen con una interpretación sea constantemente interesante y viva con significado relaciones cambiantes. Cómo en la vida cuándo hablás con una persona de frente y podés ver sus expresión facial y escuchar los cambios en el sonido de su voz.

¿Cómo es la repercusión o aceptación del público de New York con respecto a la música en la que el ensamble se especializa?

New York, cómo capital cultural, tiene una audiencia aventurera que verdaderamente viene a escuchar lo nuevo y lo moderno. Es uno de los mejores lugares del mundo para involucrarse con la nueva música porque hay un interés realmente sustancial, una cadena de apoyo y muchos eventos. En general ha habido recientemente un surgimiento de interés por la música contemporánea, así que las grandes instituciones han abrazado eso, relacionándose con nuevas obras e intérpretes.

Pero siempre hay organizaciones que ven la música clásica solo como el viejo patrimonio de composiciones y es solo eso lo que quieren escuchar. Yo amo esa música también y creo que es maravilloso seguir disfrutando esas obras, pero hay gente que va a encontrar que puede también disfrutar nuevas experiencias musicales si tan solo lo intenta ( y si lo comunicamos bien). La música de «ahora» está usualmente un paso más adelante de la «zona de confort» de algunos oyentes; así que tenemos que seguir trabajando para que la forma musical continúe desarrollándose y expresando la época actual.

¿Qué aspectos de una obra hacen que te interese incorporarla a tu repertorio solista o con el ensamble?

Busco obras que transmitan algo muy vivo, ya sea la atmósfera, emociones, cierto tipo de energía, o un sonido del mundo. Como intérprete, me gustan los desafíos y obras que necesiten ser descubiertas y trabajadas, pero me pone contenta tocar algo que parezca «simple» de tocar si transmite algo intenso. Estoy interesada igualmente en obras nuevas que estén relacionadas con la tradición y obras que experimenten con cosas nuevas, técnicamente o en el lenguaje o la forma.

¿Cómo fue la experiencia de trabajar con el compositor Mario Davidovsky?

Mario es un músico asombroso. Es tan imaginativo y animado y escucha de una manera muy absorvida, y apasionada, como si estuviera tocando la música. Nos indicó cosas muy importantes acerca del balance de las voces, el tiempo de un efecto o el carácter de un gesto. Al igual que con la música electrónica, las dinámicas y timbres son una parte crucial de su música instrumental y muestra cómo la hacen más expresiva si realmente se trabajan. Su música está escrita increíblemente bien y está llena de su personalidad e historia y una muy profunda espiritualidad terrenal. Trabajando con él en persona, uno relaciona la música con la persona directamente, es muy conmovedor e inspirador.

¿Es tu primera visita a la Argentina?

Sí, fue mi primera visita y fue ¡fantástico!

¿Tenés invitaciones para volver en el futuro?

Si, el Director del CETC, Miguel Galperin, y yo vamos a hablar acerca de nuestro próximo proyecto juntos. Así que espero volver pronto. Será maravilloso tocar para el público en Buenos Aires nuevamente.

¿Qué proyectos te esperan en los EE.UU?

Voy dar algunos recitales como solista este año, incluyendo nuevas obras para violín para mi nuevo CD «Melting th Darkness» (que será lanzado en noviembre). También de algunos compositores norteamericanos como Roger Sessions y Donald Martino. Voy a continuar presentándome con varios ensambles y colaborando con compositores en nuevas obras, algunos compositores están escribiendo para mí en este momento. También voy a estar planeando los próximos proyectos con Nunc.

Por Nicolás Gagliani

 

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