Hugo Fattoruso y Daniel Maza con clave candombera

El dúo de instrumentistas charrúas fue el encargado de cerrar el Ciclo Uruguayo del Café Vinilo. Una velada de alto vuelo musical con epicentro en los ritmos latinoamericanos.

Por Iván Gordin.

A esta altura, la figura de Hugo Fattoruso tiene una dimensión inigualable para la cultura uruguaya -y mundial, me animaría a decir-. Desde el beat de Los Shakers hasta el jazz fusión de OPA, el arreglista y multinstrumentista oriental ha sido un faro de influencia para cientos de músicos que han surgido de los pagos rioplatenses. Así lo cuenta Luis Alberto Spinetta, Charly García, Jorge Drexler y su longevo compañero de ruta, Daniel Maza. Este último es de una generación posterior y con los años ha crecido en ese mestizaje de ritmos que Fattoruso hizo tan propio durante la década de los setenta. Asimismo, Maza también es un músico con un aproximación muy particular al bajo eléctrico, capaz de darle un giro cumbiero a Jaco Pastorius. En ese caluroso terreno de frases, melodías y claves latinoamericanas es en donde se afirma el dúo para brindar su concierto este viernes en el bar porteño.

El piano y el bajo eléctrico de cinco cuerdas dejaron de ser simples decorados y se convirtieron en música alrededor de las 9 y media, cuando los primeros acordes de “una chacarera mala” (sic Maza) empezaron a sonar por el aire. “Fatto y Maza”, algo así como un Laurel & Hardy musical, mantienen una sonrisa estoica durante cada interpretación. Los dos saben muy bien a dónde van y qué es lo quieren. El procedimiento parece siempre partir de un ritmo específico -puede ser folklore, tango, samba brasilera, candombe- que es matizado por la especies armonías jazzeras y las blue notes que se desprenden ocasionalmente de ambos instrumentos. A diferencia de muchos artistas de jazz, los charrúas no se regodean en solos infinitos, sino que priorizan la canción y la musicalidad de la melodía; el desvío se mantiene en un radio conocido, apoyado constantemente por la impronta del groove.

Promediando la noche, ambos músicos tuvieron su momento unipersonal. Fattoruso presentó un nuevo material y, al mismo tiempo, demostró su amor por la música brasilera con la samba “Ojos castaños”, y Maza no pudo disfrazar su pasión por el Funk con una rendición de “La fantasía del pollo”, un homenaje a “The Chicken” de Pastorius. El tandem volvió a completarse y se metió de lleno en su veta más tradicionalmente jazzera, Fattoruso y Maza establecieron un placentero diálogo de motivos y pequeñas frases, sostenidas siempre por la muralla rítmica que compone la mano izquierda del pianista y el slap del bajo.

La presentación de Hugo Fattoruso y Daniel Maza fue un cierre de lujo para un ciclo que tuvo la pericia de aunar a algunos de los talentos más grandes del continente. El Café Vinilo continuará con su apuesta por la alta calidad musical con Dino Saluzzi, quien se estará presentando los días 1, 2 y 3 de febrero a las 21 h.

 

Concierto realizado en Sala Lavarden el 02-05-2014 (Ciudad de Rosario, Prov. de Santa Fe, Argentina).

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