El domingo 25 de septiembre a las 18 horas se presenta, con un muy interesante programa de concierto, Cecilia Isas en violín y Alan Kwiek en piano en la Sala Argentina del CCK con entrada libre y gratuita. Desde MCBA pudimos conversar con ellos para saber más acerca de esta formación a la que la mismísima Martha Argerich calificó como "Un dúo buenísimo, con mucha pasión y mucho que aportar al panorama musical argentino, tanto en repertorio como en calidad interpretativa…".
¿Cómo se forma este dúo?
Kwiek-Isas: En realidad nuestro encuentro se dio en primer término para formar un cuarteto, por el simple deseo de hacer música, pero por distintas razones ese plan original de cuarteto devino en dúo, y encaramos la idea de presentarnos como dúo Isas-Kwiek en el concurso que realizó Argentmusica en 2008, con un programa exclusivo de música argentina. Allí resultamos ganadores del primer premio y seguramente esa fue una razón más “formal” para considerar el proyecto ya de manera estable. Luego ganamos también el primer premio del concurso de música de cámara del Fondo Nacional de las Artes con un repertorio clásico y romántico…
¿Cuáles son sus búsquedas estéticas y artísticas? ¿Cuáles creen que son las mayores virtudes de este dúo?
Kwiek-Isas: Como músicos intérpretes, recreadores pero no creadores totales, creemos que el ámbito de la búsqueda estética está ligado a la empatía que se pueda tener con una obra. Es decir que más que una búsqueda, es un encuentro estético, esa empatía, ese gusto además va modificándose continuamente. Y como artistas, justamente la labor más importante para nosotros, es la búsqueda de la imagen estética de cada composición, la vida misma de la obra musical. Esa imagen es la que luego debe ser transformada en sonido, y de ahí el desarrollo artístico de la técnica instrumenal, en pos de poder crear, la misma persona y con el mismo instrumento, sonidos particulares para cada estética, y que todo ello finalmente sea entregado al público de forma bella y amorosa, con el deseo de compartir la misma emoción profunda, esa sensación de totalidad, que creemos, sólo puede producir la música.
¿Qué tipo de repertorio aborda?
Kwiek-Isas: No tenemos un tipo de repertorio en particular, lo que presentamos en público es una mezcla del resultado entre lo que nos gusta, lo que nos parece que debemos hacer para nuestro desarrollo como músicos y lo que nos piden los organizadores de conciertos. Algo así sería lo que encuadra en general el repertorio que abordamos, que incluye desde Bach hasta música del siglo XX, como por ejemplo en este caso, la sonata de Bacewicz que fue compuesta en 1947 que cierra el programa que abrimos con el opus 24 de Beethoven que fue publicado en 1801.
¿Cuál es su concierto más recordado y por qué?
Cecilia Isas: El concierto que dimos en Mendoza en 2015 en el Festival de los Caminos del Vino. El lugar era particularmente bello, una imponente bodega con una cava con capacidad para unas 500 personas, el escenario en círculo, el público en enormes gradas rodeando todo el escenario, sala llena, de los enormes toneles provenían aromas de uvas, cierto clima de embriaguez reinante entre nosotros y el público una sensación de comunión. Aclaro que no he probado ni una gota de nada antes del concierto….(¡Risas!).
¿Cómo surgió la idea de dedicar la segunda parte del concierto en el CCK a las mujeres compositoras?
Alan Kwiek: Por pedido de la Asociación Musical de Bolívar hicimos hace un tiempo un recital para el día de la mujer y para esa ocasión nos pidieron incluir obras de mujeres y entre ellas las romanzas de Clara Schumann, para completar ese programa hemos investigado y nos hemos encontrado con un repertorio maravilloso que por tratarse de producción femenina quedó relegado durante siglos en algunos casos… Eso nos llevó a conocer por ejemplo a una compositora de la talla de Bacewicz o a Lili Boulanger, que si bien de ella tocaremos una obra breve, me permito contar que fue ganadora del "Prix de Rome", por su obra Faust et Helene, a los 21 años siendo la primera mujer que obtiene el mismo galardón que Berlioz y Bizet. Quisimos para esta ocasión, presentar una propuesta de programa diferente con “novedades” que se complementan con la primera obra que es un clásico de la música de cámara.
¿Qué nos pueden contar acerca de las compositoras y de las obras que estarán interpretando sobre todo de aquellas no tan conocidas por el público?
Cecilia Isas: La Romanza opus 23 de Amy Beach, bellísima obra de temperamento romántico, fue dedicada a la violinista Maud Powel con quien la estrenó en el Congreso Musical de la Mujer en 1893 (EE.UU.) donde presentaron un documento titulado “La mujer y el violín” en el que alentaban a las mujeres jóvenes a iniciarse en el violín profesionalmente. Momento en que la mujer no podía integrar una orquesta o votar. Justamente el carácter romántico-virtuoso de la obra tiene que ver con el hecho de demostrar cómo las mujeres pueden vencer dificultades técnicas tanto como los hombres.
¿Por qué creen que compositoras como Fanny Mendelssohn o Clara Schumann no tienen el lugar que merecen en el repertorio todavía?
Alan Kwiek: Principalmente creo que el estigma que creó durante siglos el machismo no puede desaparecer tan rápidamente… Pensemos todo lo que tuvo que luchar Clara Schumann siendo el genio que fue para hacerse valer en un mundo reinado por hombres entre los cuales figuraban Liszt, Paganini o Chopin. Por otra parte, personalmente creo que el hecho de que en la mayoría de los casos, las complejidades técnicas que presentan las obras son semejantes a las que tiene una sonata de Beethoven o Prokofiev, lo que da lugar al intérprete a la siguiente especulación, de que el esfuerzo es, digamos el mismo, frente a la obra conocida o a la desconocida, pero el riesgo que se corre en presentar una obra nueva al público, contrasta con la “seguridad” que existe detrás de presentar una obra conocida respecto al “éxito” que la misma ya tiene por sí sola en principio, en cuanto a la aceptación o el gusto del público. Sin embargo, mas allá de seguridades y éxitos, es obligación de un artista dar a conocer obras que considera de valor, que lo movilizaron y estimularon, lejos de cualquier especulación, movido por la emoción y el juicio individual del valor artístico.
¿Qué nos pueden contar de la compositora Grazyna Bacewicz de quien estarán estrenando una obra en Argentina?
Cecilia Isas: Bacewicz nació en 1909 y fue una personalidad artística muy singular. Violinista virtuosa con amplia carrera de solista de 1930 hasta 1954 año que interrumpió este aspecto de su vida musical por un accidente de tránsito que le dejó secuelas físicas. Fue además una pianista excelente, compositora, docente, concertino de la orquesta de la radio de Polonia. Existen grabaciones de ella como intérprete en youtube: Bacewicz plays Bacewicz, que dan muestra del alto grado de virtuosismo alcanzado en el violín. Tiene, por nombrar alguna de sus obras, siete conciertos para violín, uno para piano, cuarteto de cuerdas, estudios para piano, gran concierto para orquesta sinfónica y cuatro sonatas para violín y piano. Nosotros estrenaremos en Argentina la 3era. de un lenguaje mas bien neoclásico, aunque la propia Bacewicz renegaba de que se llamara así al segundo período de su etapa creadora al que pertenece la sonata. La obra cuenta con 4 movimientos y tiene forma cíclica, dura 20 minutos aproximadamente. El trabajo de las texturas y los timbres es una de las cosas que más me gustó desde un comienzo y el tipo de escritura da cuenta de cuánto y cómo conocía de bien ambos instrumentos…
Por Maxi Luna.
