Entrevista a Ricardo Sciammarella, director del Ensamble Concentus BA

Entrevista a Ricardo Sciammarella, director del Ensamble Concentus BA

Ricardo Sciammarella: “Todo se pone en cuestión y nada es definitivo”

Ricardo Sciammarella es director del Ensamble Concentus BA, una agrupación surgida en los tiempos complejos de pandemia. Concentus BA y sus integrantes se dedican al repertorio clásico romántico europeo y sudamericano -con criterios historicistas-, una tarea tan interesante como compleja. Con Sciammarella hablamos del ensamble, el repertorio que interpreta y su futuro.


Por Virginia Chacon Dorr.

Por favor cuéntenos un poco sobre cómo se originó el Ensamble

El Ensamble surgió a continuación de mi presentación al frente de la Orquesta Sinfónica Nacional en la Temporada 2019, con un programa dedicado a la primera escuela de Viena. En aquel momento, junto con un grupo de personas, tomó cuerpo la idea de crear un ensamble de tipo historicista que siguiera el modelo de The age of Enlightment en cuanto a propuesta musical. Consideramos que ya hay muchos grupos pequeños de tipo barroco y nada que se dedique al repertorio instrumental de mediados del XVIII a mediados del XIX. Así es que nos convertimos en una especie de pioneros en un territorio hasta ahora dominado por las grandes orquestas sinfónicas, no sólo locales sino también del resto del país.

Le llamamos Concentus por el significado de la propia palabra, pero además como un homenaje personal a quien de alguna manera encarna la filosofía de todo esto, y que no es otro que Nikolaus Harnoncourt.Y ya para rematar deseo subrayar un detalle no menor, sino que para mi tiene una importancia capital: los músicos de Concentus BA vienen de todo el pais, de Córdoba, Rosario, Mendoza, Santiago del Estero.

Finalmente, a este diferencial se suma el que me interesa hacer propuestas que vayan a provocar al oyente por medio de experiencias crossover y así romper con una cierta inercia de “voy al concierto”. Este aspecto no es sencillo y estamos trabajando mucho en ello con mi equipo.

¿Cómo fue funcionar durante la pandemia?

Como para casi todos, o todos a secas, fue una pesadilla. No veíamos por dónde poner en marcha las energías. Decidimos que hacer videitos no era el camino y, cuando en medio de la tormenta apareció un rayo de sol, se nos ocurrió hacer aquella primera propuesta del Stabat Mater en homenaje a las víctimas y al personal sanitario.

Durante una semana del mes de noviembre ensayamos en la terraza de la Fundación Beethoven, cada día era como un volver a empezar porque nunca sabíamos quien no vendría: algunos músicos, que en un principio se comprometieron, dieron marcha atrás a último momento por miedo razonable, y siempre con el terror de que en cualquier momento el contagio nos pararía los pies. Afortunadamente nada de eso sucedió y llegamos a la grabación en San Benito un día medio gris, pero que acompañó. El éxito de aquello me sorprendió. El entusiasmo de Allegro HD fue un gran estímulo. Debo decir que las chicas, Marina (Silva) y Rocío (Arbizu), lo hicieron de maravilla.

La siguiente producción, que se está visualizando en estos momentos por Allegro HD, ya se hizo en otras condiciones afortunadamente.

Si tuviese que describir a un melómano -no experto- la diferencia de interpretación entre una agrupación instrumental estándar actual (que interpreta Mozart y Haydn) y el Ensamble Concentus BA, ¿qué le diría?

Lo primero que le diría es que se imagine un cuadro renacentista antes de ser restaurado: colores cargados de aceite, pigmentos oscuros, espesos, y el después: colores vivos, mucho ritmo y vitalidad.

Pero hasta ahí por lo que se refiere al museo, porque se trata de música viva con la que esperamos sorprender y perturbar al oyente. Lo invitamos a hacer un viaje, a tratar de dejar fuera de la sala sus grabaciones fetiche y sus déjà vu. Casi diría que a imaginarse en el siglo XVIII.


¿Qué tipo de repertorio hace
Concentus?

El Ensamble abarca casi un siglo de música, desde mediados del XVIII hasta mediados del XIX. En estos momentos estamos investigando el repertorio sudamericano para ponerlo en valor, Esnaola y tantos otros músicos que crearon en nuestro continente.

El año próximo, gracias a un acuerdo con el Gobierno Vasco grabaremos nuestro primer CD con la música de Juan Crisostomo de Arriaga, un cuasi desconocido por estos lares.

Pero además, este año, en nuestro segundo concierto haremos una experiencia de diálogo entre el siglo mozartiano y nuestro tiempo; se me ocurrió encargar una obra de estreno absoluto a uno de nuestros compositores de referencia. Será un diálogo entre Mozart, nosotros, y él. No digo su nombre para no desvelar demasiado la sorpresa. Esto también es importante para mi: siempre mantener un diálogo con el hoy, no solo en la música sino también con las demás artes. Fue Henri Dutilleux quien dijo que finalmente el arte, la música, siguen siendo los mismos desde el XVII… y algo de razón no le falta.

Pero siempre sin renunciar a nuestros genios esenciales: Haydn, Mozart, Beethoven, Schubert.

Cuéntenos un poco su propia historia con la música, ¿cómo llega a interesarse en formar un ensamble de época?

A estas alturas ya no puedo decir como Mimi “la mia storia e breve”. Vengo de una familia de músicos, la música es parte de mi vida desde que nací. Crecí literalmente en el Teatro Colón, primero como coreuta a los cuatro años, formando parte del Coro de Niños que dirigía mi padre. Más tarde llegó el violoncello, un viaje a Viena donde estudié con uno de los más grandes violoncellistas de la historia del instrumento, André Navarra, que me marcaría a fuego en muchos sentidos. Fue una experiencia extraordinaria.

Con el paso del tiempo llegó la fatiga con demasiado Lutoslawski, Ginastera, Prokofieff, Kodaly y comienzan los cuestionamientos, la investigación, las pruebas y la necesidad vital de hacer esa música buscando recuperar una determinada forma de decir, de pronunciar. Todo se pone en cuestión y nada es definitivo, en todo caso es definitivo para un determinado momento y luego es vuelta a empezar. Cada experiencia se vuelve única y singular.

Sobre todo me gusta la idea de hacerlo en mi país, con gente de todo el país, romper con ciertas inercias… siempre romper con las inercias.


Ahora van a interpretar obras de Haydn en la Usina. Su repertorio es fundacional en muchos sentidos. ¿Qué nos puede contar de las obras que eligió para el concierto?

Decir que Haydn es fundacional para cualquier músico es una forma certera de ponerlo. Pero, cuidado, este no es el Haydn del viejo cliché “el padre de la sinfonía” o “el padre del cuarteto”, entre otras cosas, porque no es del todo cierto.

Lo que sí es cierto es que su lenguaje, su sintaxis, debiera estar en el centro de toda experiencia musical. Es tan audaz, tan revolucionaria en todos los aspectos, ya sea el formal como el tímbrico. Todo esto y mucho más lo vuelven esencial, imprescindible, inagotable…

Elegí este repertorio porque es fiel reflejo de dos cosas: por un lado, la importancia que tenía la voz para el compositor; y por el otro, la increíble teatralidad de su música instrumental, llamémosle, pura. En él todo es teatro, por eso abrimos con una obertura y luego seguimos con la Cantata “Miseri noi, misera patria”, que es una joyita muy poco conocida y que, si no me equivoco, es un estreno en nuestro país (espero que algún memorioso me corrija), para terminar con ese derroche de fantasía y humor que es la Sinfonía Oxford.

Si tuviese que decirle al público por qué disfrutaría de acercarse a la obra de Haydn, o de Mozart, interpretada por Concentus, ¿qué le diría?

Les diría que se imaginen que van a hacer un viaje fantástico.. que a veces no va a ser cómodo, que van a descubrir mundos insólitos, increíbles, de luz, de oscuridad… de magia y fantasía. Pero sobre todo les diría que no hace falta haberlos escuchado antes, es más, casi sería mejor que no los hubieran escuchado en su vida para tener así la suerte de experimentar aquella experiencia mágica de la primera vez. Hubo una época en la que en Viena se cantaban por la calle las arias de Bodas de Fígaro y no era, precisamente, la alta burguesía la que lo hacía. Y por último, que somos unos rockeros muy locos.



El Ensamble Concentus BA se presentará en la Usina del Arte,  en su Sala Sinfónica, el día 26 de Junio a las 11.30 de la mañana. Realizará un primer concierto dedicado a Franz Joseph Haydn bajo la dirección de su fundador el Mto. Ricardo Sciammarella.


Link a la revista dónde se incluyó esta entrevista:

https://musicaclasica.com.ar/revista/revista-musica-clasica-buenos-aires-3-0-35-junio-2022/

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