Forma de piano y sonido de violonchelo. Así fue el instrumento que Leonardo Da Vinci imaginó hace 500 años, que, sin embargo jamás se había hecho realidad. Hasta que Slawomir Zubrzycki decidió que quería escucharlo.
Hoy, 15 de abril, celebramos el Día Mundial del Arte en honor al aniversario de nacimiento de uno de los más grandes genios de la historia: el arquitecto, escultor, pintor, inventor e ingeniero Leonardo da Vinci (Vinci, 15 de abril de 1452 - Amboise, 2 de mayo de 1519).
Entre los bocetos de máquinas voladoras, paracaídas, trajes de buceo o tanques blindados de los famosos cuadernos de Leonardo Da Vinci se encuentra el de un instrumento musical que fusiona el clavicordio y el violoncello y al que el pensador italiano llamó el ‘órgano viola’ sin que nunca lo llegara a desarrollar.
Bautizado como Viola Organista, es una especie de piano, cuyo teclado presiona cuerdas sobre ruedas envueltas en pelo de caballo, para así emitir un sonido dulce similar al del violonchelo.
Boceto de Leonardo Da Vinci.
Zubrzycki se puso manos a la obra y siguió los planos que dejara el maestro renacentista. Luego de unas 5.000 horas de trabajo durante más de tres años y casi diez mil dólares, lo ha convertido en realidad en el año 2015.
El instrumento contiene sesenta y una cuerdas de acero situadas en el interior como un piano de media cola. Cada una de ellas está conectada al teclado con teclas negras más pequeñas para las notas agudas y a diferencia de un piano no tiene martillos sino una especie de cuatro ruecas envueltas en pelo de cola de caballo, como el arco de un violín . Para activarlas, Zubrzycki golpea un pedal debajo del teclado conectado a un cigüeñal.
Más de 500 años después de su invención, el sonido de este peculiar instrumento se escuchó por primera vez en Polonia, en un concierto en la Academia de la Música de Cracovia.
Leer también: Bartolomeo Cristofori: El inventor del piano