En esta temporada la ópera bufa belcantista está representada por el éxito que puso fin a su género.
Por Julián Guzzo*.
Donizetti estrenó una de sus últimas óperas, Don Pasquale, en el Théâtre-Italien en 1843, cuando una buena recepción por parte del público parisino significaba, generalmente, la pronta consagración global de la obra. A pesar de que la tradición bufa napolitana estaba en desuso, no fue ajena al éxito y hoy en día regresa al Colón con una puesta atractiva que pone el foco en el desempeño actoral y en la agilidad de las voces.
La función estuvo dedicada al escenógrafo Juan Carlos Grecco y contó con un elenco privilegiado. Cumplió con las exigencias del estilo bel canto, adecuado al carácter de cada personaje y con una interpretación siempre irónica. Estas virtudes interpretativas incrustadas en una estructura dinámica, donde los conjuntos fueron protagonistas, hicieron llevadero el clásico argumento y atenuaron lo que podría haber tenido de perverso: un septuagenario que, al casarse con una joven para desheredar a su sobrino, termina cayendo en una trampa que no hace más que confirmar su ineludible vejez.
Inmersa en una escenografía clara y funcional se destacó, por su actuación impecable, la soprano rosarina Jaquelina Livieri (Norina) quien tuvo la compleja tarea de asumir dos personalidades muy bien diferenciadas, a través de la voz y de los gestos. Además, ofreció los dúos más memorables de la noche: “Vado, corro” junto a Darío Solari (Dr. Malatesta), que cerró el primer acto con un limpio y poderoso juego escénico y vocal, y “Tornami a dir che m’ami” durante el esperado encuentro con el bel canto del tenor Santiago Ballerini (Ernesto) y por lo tanto de los dos jóvenes enamorados.
Luego del segundo intervalo hizo su primera aparición escénica el Coro dirigido por Miguel Martínez, logrando reanimar el drama. También fue destacable, por su variedad, el guiño hacia el propio género bufo y teatral del dúo para barítono y bajo “Aspetta, aspetta, cara sposina”, donde Solari volvió a mostrar toda su habilidad junto a la de Nicola Ulivieri (Don Pasquale).
El aspecto tardío, tanto de un estilo como de la producción propia del compositor, fue percibido desde la obertura ejecutada por la Orquesta Estable, a cargo de Srba Dini?, hasta el último sonido de la obra. Los concisos temas recurrentes, los espontáneos cambios de carácter y la búsqueda de continuidad son rasgos que rompen con la estructura clásica y llevan a la ópera bufa más allá, hasta (paradójicamente) desaparecer. La puesta es una instantánea de Don Pasquale que representa una síntesis de tendencias vivas que tanto la dirección escénica como musical explicitaron fielmente.
Ficha técnica:
Don Pasquale de Gaetano Donizetti. Dirección musical: Srba Dini?. Régie: Fabio Sparvoli. Elenco: Nicola Ulivieri, Jaquelina Livieri, Santiago Ballerini, Darío Solari y Mario de Salvo. Escenografía e iluminación: Enrique Bordolini. Vestuario: Imme Möller. Sala: Teatro Colón, viernes 27, Abono nocturno tradicional. Repite 29 de septiembre, 1 y 2 de octubre. Calificación: Muy buena.
*Estudiante del seminario Música y Crítica periodística (CC Paco Urondo 2019)
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