Bragato 100 años con Zanon, Hugo Marcel, Atlio Stampone, José Araujo y Pablo Agri
A la edad de 101 años (“Casi 102”, como solía decir el Maestro) falleció José Bragato, destacada personalidad de la música popular y clásica argentina. Bragato nació en Udine (Italia) el 12 de octubre de 1915 y su familia emigró a Argentina en 1928, adoptando desde entonces dicha ciudadanía. Fue músico, violoncellista, compositor y arreglador.
Inició sus estudios musicales en su ciudad natal, Udine en el Conservatorio Jacopo Tomadini y los continuó en Buenos Aires en el Conservatorio Nacional de Música Manuel de Falla. Estudió violoncello con el Profesor Ernesto Pelz en forma particular y se perfeccionó durante tres años con José Puglisis. Desde muy jóven se desempeñó en diversos conjuntos sinfónicos y de cámara. Integró el famoso Cuarteto de Carlos Pessina. Ganó por concurso el puesto de solista en la creación de la actual Orquesta Filarmónica de Buenos Aires. Integró la Orquesta Estable del Teatro Colón de Buenos Aires de donde se jubiló en 1968 con el cargo de Solista Interino. Fue solista de la Orquesta Sinfónica de Porto Alegre (Brasil) y contratado por la Universidad de Rio Grande Do Norte para fundar el cuarteto de la institución y su orquesta de cámara. Su último puesto fue en la Orquesta de “Juan de Dios Filiberto” de Buenos Aires. Desde entonces se dedica a la composición y del archivo de SADAIC que desde 1985 crea el Archivo de Música de Cámara y un catálogo del mismo que reúne la obra de compositores argentinos.
Entre sus primeras incursiones por lo popular cabe destacar su actuación con el conjunto la Brighton Jazz de Argentino Galván y Elvino Vardaro. Llegó al tango con la agrupación de Mario Maurano en 1938. Integró la orquesta de Enrique Francini y posteriormente colaboró con Mariano Mores, Aníbal Troilo, Los astros del Tango, Atilio Stampone y con el 1º Cuarteto de Cámara del Tango. Para este grupo concibió y escribió varios arreglos.
“Una vez me salió una gira enorme para hacer con la orquesta de Francini. Pero me quedé acá. Había ganado el concurso para entrar a la orquesta del Colón y mi madre me dijo: ‘Usted va al Colón’. Y yo era muy respetuoso de mis padres. Así que obedecí”. Con los años, y aunque se jubilaría en la Estable del teatro, Bragato tocaría con muchos notables directores de tango, entre otros, además de Francini-Pontier, con Aníbal Troilo, Osvaldo Fresedo y por supuesto Astor Piazzolla, de quien fue gran amigo y compinche musical. (Revista Ñ, “La música se pone esmoquin”, 13 de julio de 2015, extracto).
En 1955 conoce a Astor Piazzolla y desde entonces no solo actúa con sus más importantes grupos como el Octeto de Buenos Aires, el Noneto y el Sexteto de los último años de vida de Astor, sino que forma una intensa y estrecha amistad. Además Bragato se convierte, por pedido de Piazzolla, en su más importante arreglador oficial de sus obras siendo reconocido mundialmente. Bragato es también un genial compositor figurando entre sus obras” Tres movimientos porteños” para cuarteto de cuerdas, “Graciela y Buenos Aires” para cello y piano (u orquesta de cuerdas); “Ritmos de malambo”, “Las canciones que cantaba mi madre”; la suite criolla “Milontan, “Triste y Zamba” y “Chacarera”; “A Mauricio”; “Malambo”, entre otras.
“En 1955 fundó junto a Astor Piazzolla lo que se conoció como la Vanguardia del Tango y se produjo la revolución del 2×4 en Buenos Aires. En el documental, el mismo Bragato cuenta que luego de tocar con el Octeto Buenos Aires –Piazzolla, Atilio Stampone, Leopoldo Federico, Enrique Mario Francini, Hugo Baralis, Juan Vasallo y Horacio Malvicino– sale un hombre a la calle y escucha un tango cantado por Carlos Gardel y se alivia al reconocer una voz familiar, un clásico. “La gente grande quería el tango tradicional”, reflexiona Bragato.
“Yo le dije un día: ‘Te voy a hacer los arreglos para orquesta así te conocen’. Y él estuvo de acuerdo”, resume Bragato la historia de cómo empezó a trabajar con las composiciones de Piazzolla. Gina aclara que no fue así nomás y completa la idea: “Un día le dijo: ‘Mirá, Astor, no sé si vas a estar de acuerdo; tu música no se va a tocar seguido, qué te parece que haga un abanico de tus obras, para dúo, trío, cuarteto y hasta octeto’. Entonces Astor, ni lento ni perezoso, dijo ‘brillante idea, ¿cómo me voy a oponer?’. Y le dio el permiso con un escribano para que no lo fueran a fastidiar diciendo que José había robado la obra. Y de ahí salió, por ejemplo, el ‘Adiós, Nonino’ para octeto de cellos”. (Página/12, 13 de octubre de 2015, “Todo un siglo dedicado a la música”, extracto).
Entre los últimos premios recibidos cuentan el que le otorgara la Ciudad de Buenos Aires como Ciudadano Emérito el 15 de octubre de 1998, el premio a la Trayectoria de SADAIC en 1999, el homenaje de la Orquesta Filiberto y el homenaje a sus 90 años en mayo de 2006 en Lucerna, Suiza donde viajó invitado por la Fundación El Sonido y El Tiempo Internacional y el Conservatorio Nacional de Lucerna para festejar su aniversario con el grupo de cámara suizo Chamber Soloists Lucerne y el pianista argentino Daniel Goldstein con un concierto donde se interpretaron sus obras y arreglos de Piazzolla.
El 24 de abril de 2014, el Maestro José Bragato recibió el diploma de “Personalidad Destacada de la Cultura Porteña” en la Legislatura Porteña, y al año siguiente la Fundación El Sonido y El Tiempo le dedicó dos homenajes por su centenario y la presentación de la película José Bragato, Partituras de su vida, dirigida por José Luis Castiñeira de Dios y producida por Nicolás Borenstein. En agradecimiento y como eventos difusores de su obra, participaron del homenaje interpretando obras de Bragato los artistas Christine Walevska, Rafael Gintoli, Rizardo Zanón, Daniel Goldstein, Orquesta Municipal de General San Martín, Daniel Batistta, José Luis Castiñeira de Dios, y la Orquesta Juan de Dios Filiberto.
Fundación El Sonido y El Tiempo